San Lorenzo – Lunes de la XIX Semana del Tiempo Ordinario
Desprenderse de uno mismo no es solo fruto del
voluntarismo humano. La gracia de Dios hace posible ese salto cualitativo en la
entrega generosa a los demás por la adhesión a Cristo. Así fue y es la vida de
los mártires. Vidas entregadas que han dado fruto en abundancia.
Reza Vísperas en tu dispositivo
Juan 12, 24-26
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«En verdad, en verdad os digo: si el grano de trigo no
cae en tierra y muere, queda infecundo; pero si muere, da mucho fruto.
El que ama a sí mismo, se pierde, y el que se aborrece
a sí mismo en este mundo, se guardará para la vida eterna. El que quiere
servirme, que me siga, y donde esté yo, allí también estará mi servidor; a
quien me sierva, el Padre lo honrará».
No hay comentarios:
Publicar un comentario