martes, 19 de noviembre de 2019

Buscando...



Zaqueo estaba en actitud de búsqueda. Condición indispensable para abonar la posibilidad de un encuentro con el Señor. El que se siente satisfecho y se cree autosuficiente no necesita de encuentros de este tipo. El encuentro con el Señor transforma radicalmente. Por eso es tan importante nuestra disposición. Hoy nuestra disposición se ha llenado de cosas que no dejan ver nuestros vacíos.

Lc 19,1-10
En aquel tiempo, entró Jesús en Jericó y atravesaba la ciudad.
Un hombre llamado Zaqueo, jefe de publicanos y rico, trataba de distinguir quién era Jesús, pero la gente se lo impedía, porque era bajo de estatura. Corrió más adelante y se subió a una higuera, para verlo, porque tenía que pasar por allí.
Jesús, al llegar a aquel sitio, levantó los ojos y dijo:
-Zaqueo, baja en seguida, porque hoy tengo que alojarme en tu casa.
El bajó en seguida, y lo recibió muy contento.
Al ver ésto, todos murmuraban diciendo:
-Ha entrado a hospedarse en casa de un pecador.
Pero Zaqueo se puso en pie, y dijo al Señor:
-Mira, la mitad de mis bienes, Señor, se la doy a los pobres; y si de alguno me he aprovechado, le restituiré cuatro veces más.
Jesús le contestó:
-Hoy ha sido la salvación de esta casa; también éste es hijo de Abrahán.
Porque el Hijo del Hombre ha venido a buscar y a salvar lo que estaba perdido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario