viernes, 2 de junio de 2023

Tened fe...

 Viernes de la VIII Semana del Tiempo Ordinario

No son pocas las ocasiones en las que Jesús le pide fe a los discípulos. Es la respuesta a la llamada. La confianza profunda en Dios a veces se ve enturbiada por los signos externos, por el materialismo y por el ritmo desenfrenado de la sociedad. Pedro necesitó tiempo para entender la importancia de la fe.


Reza Laudes en tu dispositivo

Reza Vísperas en tu dispositivo

Mc 11,11-26

Después que el gentío lo hubo aclamado, entró Jesús en Jerusalén, en el templo, lo estuvo observando todo y, como era ya tarde, salió hacia Betania con los Doce.

Al día siguiente, cuando salían de Betania, sintió hambre. Vio de lejos una higuera con hojas, y se acercó para ver si encontraba algo; al llegar no encontró más que hojas, porque no era tiempo de higos. Entonces le dijo:

«Nunca jamás coma nadie frutos de ti».

Los discípulos lo oyeron.

Llegaron a Jerusalén y, entrando en el templo, se puso a echar a los que vendían y compraban en el templo, volcando las mesas de los cambistas y los puestos de los que vendían palomas. Y no consentía a nadie transportar objetos por el templo.

Y los instruía diciendo:

«¿No está escrito: “Mi casa será casa de oración para todos los pueblos”? Vosotros en cambio la habéis convertido en cueva de bandidos».

Se enteraron los sumos sacerdotes y los escribas y, como le tenían miedo, porque todo el mundo admiraba su enseñanza, buscaban una manera de acabar con él.

Cuando atardeció, salieron de la ciudad.

A la mañana siguiente, al pasar, vieron la higuera seca de raíz. Pedro cayó en la cuenta y dijo a Jesús:

«Maestro, mira, la higuera que maldijiste se ha secado».

Jesús contestó:

«Tened fe en Dios. En verdad os digo que si uno dice a este monte: “Quítate y arrójate al mar”, y no duda en su corazón, sino que cree en que sucederá lo que dice, lo obtendrá.

Por eso os digo: todo cuanto pidáis en la oración, creed que os lo han concedido y lo obtendréis.

Y cuando os pongáis a orar, perdonad lo que tengáis contra otros, para que también vuestro Padre del cielo os perdone vuestras culpas».

No hay comentarios:

Publicar un comentario